Hola estrellitas:

Cada cierto tiempo la vida te hace sentir fuerte y eso me pasa a mí ahora. Es un tiempo en el que las cosas que habían quedado sin respuesta llegan ha ser contestadas por el corazón. En este tiempo rehaces tus velas para coger vientos nuevos y volver a navegar. Es un tiempo de construcción dentro de ti y por eso doblemente bello.

Parece como si te echaras agua por encima y te convirtieras de nuevo en barro, te pusieras en un torno e intentaras darte de nuevo una forma más bella y útil para afrontar nuevos retos en la vida.

La energía fluye por todos tus poros y existe una calma interior que te hace ver el mundo con otros ojos, desde una perspectiva más alta. Desde lo alto todos tus grandes problemas se vuelven pequeñitos y alcanzas a ver nuevos horizontes a lo lejos. Esa visión te llena de esperanza y de nuevos sueños por los que luchar.

Es posible que no alcance alguno de mis nuevos sueños, pero la esperanza que hoy echa raíces en mí es la garantía de que viviré, de que sentiré. ¿Que puedo pedir más como ser humano?

Cuarto viaje por las estrellas

Hoy solo quería compartir que me he encontrado con un montón de estrellas, la sorpresa, el enfado, la reflexión existencial, el realismo, el amor, la compasión, la autoconciencia... Ha sido un día muy intenso y espero poder dormir esta noche. ¿Porqué será que los días de muchos sentimientos intensos por la noche no puedes dormir?.

Yo pienso que será porque intentas ordenarlos y no puedes. Es un puzzle que va cambiando de formas y colores y a cada momento lo ves diferente. Yo sé que tardo varios días en hacerlo pero que al final aprendo a ver nuevos colores y formas y eso es un premio en sí mismo.

Estos días es un premio mayor porque con esto de la crisis parece que todo el mundo estemos muertos y que cada día sea un episodio de Walking Dead en el que intentas no convertirte en zombi y que no te contagien los que ya estan infectados. Estamos atenazados por el miedo a morir y no nos damos cuenta que ya hace tiempo que estamos andando como zombis en busca de nuestra próxima víctima.

Víctima de nuestra deshumanizada manera de mirar, de hablar, de compartir o simplemente de saludar. Todos intentando sobrevivir al fantasma del vagabundo. Todavía estamos a tiempo de rescatar nuestra humanidad perdida, de decir no a la desconfianza en nuestros prójimos o hacia nuestros sueños. Nos toca soñar de manera diferente, aprovechar cada día ofreciendo calor humano a la gente que nos rodea. Díciendoles lo importantes que son para nosotros y lo mucho que nos han hecho progresar. Nos toca ofrecer risas a la desesperación y un abrazo a quién necesite no sentirse solo. Nos toca llorar en el hombro de quién nos lo ofrezca y agradecer porque tenemos ese hombro. Nos toca dormirnos encima de la barriguita de alguién escuchando el pum pum de su corazón y el sube y baja de su pancita. Nos toca reaprender lo que hace algún tiempo que olvidamos, que en realidad no somos dinero, sino humanidad y que juntos podemos cambiar el mundo y curar nuestras profundas heridas de desconfianza.

Como decía mi mejor compañero, somos la sal del mundo, no podemos perder nuestro sabor a Humanidad.

Tercer día de vuelo,

Hoy sobrevolamos la razón, una compañera útil e inútil a la vez. Cuando uno afronta un reto intenta llamar a esa compañera para que lo ayude a superarlo. A veces ocurre que la razón con su pétrea inteligencia es capaz de solucionar el problema ya que cuando 2 más 2 son 4 no hay más que decir. Pero la mayoría de las veces no existen sumas que hacer y la razón se enfrenta con retos donde tiene que pedir ayuda al corazón. Es ahí cuando comienza la eterna batalla de todo ser humano, una batalla en donde la frialdad de la primera tiene que derretirse por el calor de la segunda y viceversa.

Es por esto que tenemos que elegir que opción tomar, la que nos reporte calor o la que con su frío no nos haga sentir dolor. Por ejemplo cuando caminamos hoy día por cualquier calle de una gran ciudad vemos en la calle personas pidiendo limosna. Ante el dilema de ayudar o no, tenemos que elegir entre la razón que nos dicta que no podemos dar limosna a todo el mundo porque si no nos quedaríamos sin dinero para nosotros mismos y el corazón que nos impulsa a pararnos siquiera y dirigir una mirada y unas palabras a esa persona que pide, aunque no podamos hacer nada más.

Como humanos ¿qué elegiremos?. De la misma manera existen en la vida un sinfín de situaciones parecidas en las que estamos obligados a elegir. En ocasiones también podemos fabricar una respuesta intermedia con un poco de razón y un poco de corazón. ¿pero esa respuesta satisface nuestras necesidades?. No sé que decir al respesto, lo que sí sé es que es difícil acertar, o que tal vez no existe el acierto. Quizá el juego de ser humano consista en jugartela una vez por una cosa o por otra, o por la intermedia, y aprender con las consecuencias que de cada una se deriban. Existe la posibilidad de que la quispa de vivir sea jugartela sin cautelas.

Bueno creo que pongo fin a este tercer viaje, mañana despegaremos de nuevo

Segundo día de viaje estelar,

Hoy esta nublado en la calle y parece que esta a punto de llover, el día esta cambiante igual que mi estado de ánimo. A veces siento que podría hacer cualquier cosa y otras que no tengo ganas de hacer nada. Es curioso como cambia nuestro estado de ánimo con el tiempo, con las personas que nos rodean, con situaciones de estrés, cuando te toca un premio...

Por eso hoy me gustaría que contásemos como cambia nuestro estado de ánimo, qué es lo que nos impulsa a seguir adelante y que es lo que atenaza nuestra voluntad. A mi por ejemplo me impulsa a seguir adelante las ganas de conocimiento de como esta fraguado el mundo y la vida. Es apasionante comprender porque un  una molécula de agua no se mezcla con una de aceite o comprender el movimiento de las placas tectónicas. Igual de apasionante es comprender el movimiento de nuestros corazones, sobre todo el de uno mismo, porque se para cuando te enamoras de alguien y porque se mueve descompasado ante una situación de peligro, o sin ningún compás cuando te sientes triste.

Por otro lado a mi me atenaza muchas veces la incertidumbre, el no poder controlar una situación o ver que hay cosas que se escapan a mi comprensión, yo le hecho la culpa a que soy Tauro y como todos los tauros somos gente que necesitamos la estabilidad como el comer. Creo que debo de ser paciente ante estas situaciones y aprender a dejarme llevar por los demás y confiar en que todo irá bien.

Bueno ahora os toca a vosotros/as, universos visitadores de este blog ¿qué os impulsa a seguir adelante? ¿que es lo que atenaza vuestra voluntad?

Saludos y feliz viaje por vuestro bello Universo

Primer día de viaje estelar,

Una vez me dijeron que vivir es sentir y dejar que las sensaciones fluyan por todos tus poros. Les hice tanto caso que no he parado de experimentar. A veces experimentar se hace duro, pero es el recorrido de ese camino el que te ayuda a conocerte y a disfrutar de descubrir.

Muchas veces te preguntas porque nacer en un sitio o en otro del planeta condiciona tanto tus posibilidades de experimentar. En unas culturas existe la poligamia y en otras la monogamia, en unas culturas los mayores son tratados como referencias y en otras como un estorbo... A veces lo que es aceptado socialmente y lo que no, condiciona mucho la capacidad de experimentación en la vida de un ser humano.

Al hilo de esta reflexión dejaría en el aire una pregunta para que la gente que visite este blog intentase responder con su experiencia ¿te has sentido alguna vez prisionero de tu entorno social?

Bienvenidos a todas/os:

En este blog solamente se pretende conocer el interior de cada ser humano, las pequeñas estrellas que brillan en cada una de sus emociones. Compartiremos maneras de vivir diferentes, de sentir diferentes y así podremos atisbar en los demás puertas nuevas para seguir caminando por la vida. Porque es cierto que a veces uno se encuentra tan perdido/a que no es capaz de ver todas esas puertas que nos rodean. Espero que sea un blog para hacer amigos/as y sobre todo para navegar sin miedo por nuestras profundidades más insospechadas, seguro que siempre habrá alguien que sabrá lanzarnos una cuerda y sacarnos de nuestro agujero negro. Bueno bienvenidos de nuevo a nuestro viaje estelar y gracias de antemano por compartir vuestras estrellas

Muchos abrazos


Prevelicao